Considerada el Hamlet del ballet, Giselle es una obra cumbre en la que la danza se eleva en lo artístico, y se logra una gran introducción literaria. A través de la historia de una joven e inocente campesina, enamorada de Albrecht, un noble que se ha disfrazado de aldeano para conseguir su amor. El argumento de la obra se funde con la sensibilidad romántica y su coreografía, en la que se ve reflejado el estilo académico, presentado en toda su pureza de las líneas y el equilibrio de la sucesión de pasos y de figuras.
Giselle es un ballet en dos actos con música de Adolphe Adam, coreografía de Jules Perrot y Jean Coralli y libreto de Théophile Gautier y Jules-Herni Vernoy. Es la obra maestra de la danza del Romanticismo. Fue estrenada en 1841 en la Ópera de París constituyéndose en pieza pura y fundamental de la danza clásica.
Con más de 30 bailarines en escena, esta suntuosa producción del Moscow State Ballet captura toda la belleza y el drama del auténtico ballet romántico, un clásico atemporal que apela a cualquier generación.