Un BOTIQUÍN EMOCIONAL
está lleno de lugares que curan, calman
y te hacen reconectar contigo misma.
Lugares en los que has hecho un anclaje emocional
y nada más recordarlos te ponen de buen humor y cambian tu día.
Existen tantos botiquines emocionales como personas.
Si todavía no tienes el tuyo tal vez sea hora crearlo.
Cierra los ojos y empieza a pensar qué lugares te hacen feliz.
Una vez tengas tu lista de lugares,
te recomendamos visitarlos y detenerte un ratito al llegar a ellos
para admirarlos, tocarlos, olerlos, sentirlos y guardarlos en tu mente.
Algunos de los lugares nos hacen fundirnos con la naturaleza,
darnos cuenta de lo minúsculos que somos frente a la inmensidad del planeta,
otros son como un soplo de verano y llegar a ellos nos producen la sensación de habernos tomado
una píldora efervescente generadora de un torrente de pensamientos positivos.
Otros solo con cerrar los ojos y recordar lo que se siente al llegar a ellos, ya funcionan.
Este es nuestro BOTIQUÍN EMOCIONAL
FUNICULAR DE IGELDO
Todo el monte Igeldo es mágico.
Entrar en la estación del Funicular, comprar tu billete y correr a pillar el último vagón
que es el que mejores vistas tiene.
Escuchar el ruido al cerrar las puertas, el sonido de los raíles…
Ver como la playa de Ondarreta se va alejando porque tú vas subiendo..
grabar un video cuando te cruzas con el funicular que baja.
Pisar el Parque, contemplar Donosti y pensar al instante…
¿pero por qué no subo más veces?
ERMITA SANTA BARBARA EN SAN JUAN DE LUZ
Recorrer la Gran Playa hasta el final. Ascender hasta
esta ermita caminando entre serpenteantes senderos
dejando la playa abajo.
Sentarte en cualquiera de sus bancos y disfrutar del
espectáculo.
Llegar arriba, contemplar Socoa y al otro lado los
acantilados.Escuchar romper las olas, oler el mar.
FALCON CREST
Llegar andando desde Donosti por la Ruta del Faro de la Plata.
Ir rumiando en tu cabeza la recompensa que te espera cuando llegues a Pasajes San Pedro.
Correr saltando de dos en dos los escalones hacia el Faro de entrada en la bocana.
Cruzar la puerta del Falcon Crest y admirar la tipografía de su cartel.
Pedirte una caña y un completo de bonito guindillas y anchoas.
Salir fuera y aunque haya mesa libre, sentarte en el pretil, para admirar San Juan
y el suave sonido de los remeros entrando en la bocana.
EL PICO DEL LORO
El Pico del Loro con Marea Baja
Atravesar descalzo el pico del loro y admirar el verde de
sus rocas, con la isla Santa Clara de testigo y el Palacio
Miramar vigilando desde arriba
Salir del BESABI y empezar a subir al Onddi.
Flipar con lo verde que está todo, pasar temblando junto
a las vacas que te rodean y pararte hacer un par de fotos
con ellas.
A mitad de camino desviarte a la derecha y llegar a un
lugar que no se puede describir con palabras porque la
energía que desprende es Sagrada.
La agrupación megalítica de Mulisko Gaina, una de las
más asombrosas de Euskal Herria que se constituye por
cuatro crómlech.
Paseo Zarautz Getaria
Dos lugares en los que hemos pasado muchos de los
mejores ratos de nuestra vida unidos por un paseo que
cuelga junto al mar..
4,5 km de absoluta felicidad que comienzan en el
pequeño puerto de Zarautz y terminan en Getaria.
PEINE DEL VIENTO
El lugar donde termina la ciudad y empieza el mar y
donde el arte y la naturaleza se funden.
Visitarlo con olas es un espectáculo.
Pero a nosotras nos
vale cualquier día y hora de la semana.
Tres esculturas de acero incrustadas en las rocas que
dan al mar y cuyas olas las azotan.
GRUTA DEL PALACIO AIETE
Situada en una de las zonas altas de la ciudad, en los jardines
que rodean al palacio de Aiete, se respira en ella una serena
belleza natural.
Los jardines fueron diseñados por Pierre Ducasse a finales
del siglo XIX, por encargo de los Duques de Bailén.
Pero la obra maestra de Ducasse no sería la misma sin uno
de los elementos más alucinantes del parque: su gruta
diseñada por Eugene Combaz.
Está un poquito escondida y muchas veces la gente no la
encuentra, pero búscala porque vas a flipar.
👉🏻 GRUTA JARDINES PALACIO AIETE
Un lugar con una energía mágica.
Ideal para perderte paseando por sus laderas con las vacas y pottokas que viven y pastan alegres.
Jaizkibel es absolutamente terapéutico.
Si te gustan la puestas de sol, este lugar es increíble,
ver el sol fundirse con el mar sentado sobre la hierba es un espectáculo único.
JARDINES PALACIO MIRAMAR
Para ir del Antiguo al centro es una delicia atravesar sus jardines,
pisar la hierba y
sentarte junto a sus inmensas cascadas de hortensias contemplando la bahía.
Subir a las campas de Urbia desde el Santuario de Arantzazu
debería ser obligatorio al menos una vez al año.
Uno de los espacios naturales más impresionantes de Gipuzkoa.
La sensación de estar ante un lugar tan especial,
junto a las faldas de montes tan imponentes como el Aitzgorri,
hacen que esta excursión sea un auténtico must.
EL MAR
Dejamos para el final el MAR, que todo lo cura todo.
Pasear por la orilla con los pies descalzos, con el rumor de las olas y el salitre
en el aire es absolutamente terapéutico.
Contemplar el mar y escuchar el sonido de las olas
nos permite desconectar del caos en el que vivimos.
El movimiento hipnótico del mar genera una sensación
de tranquilidad y bienestar que nos recarga de energía.
¿Sabías que la brisa es rica en sales minerales y nos ayuda a respirar mejor?
¿Sabías que el yodo que se encuentra en ella actúa como un bactericida natural?
El Mar siempre el mar, cualquier época del año,
cualquier día de la semana y cualquier hora es perfecta para fundirte con él.
Ah ya sabes, si quieres ser la envidia de toda la city,
llévanos en tu móvil a todas partes, descargándote nuestra APP
DESCARGA EN APP STORE DESCARGA EN GOOGLE PLAY
Os recordamos que podéis seguir nuestras aventuras diarias
en dos cuentas de Instagram
@sistersandthecity y @sansebastiansisterstyle
Sisters and the City somos las responsables del tratamiento de tus datos.
Puedes conocer más acerca de cómo tratamos tus datos y ejercer todos tus derechos AQUÍ.
Suscribiéndote a nuestras newsletters y comunicaciones a
ceptas también nuestra política de privacidad.
..sis and the city
